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lunes, 26 de septiembre de 2011

Triatló de Tossa de Mar 2011


El pasado domingo 18 de Setiembre tocó madrugar para ir a Tossa de Mar a competir, las expectativas no eran muy buenas ya que se habían anunciado fuertes lluvias para ese día. El año pasado ya se tuvo que suspender el segmento ciclista debido a similares circunstancias, con lo que estar en el coche de camino bajo una impresionante tormenta, no era el mejor de los indicativos para pensar que podríamos disputar la prueba en su totalidad.


Llegando a Tossa, el suelo se secaba indicando que la tormenta anterior se había olvidado de esta población, pero el cielo permanecía amenazante encima de nosotros. Desde la organización daban luz verde a la prueba y nos permitían ponernos los neoprenos, debido a lo baja que era la temperatura fuera del agua (quiero creer, ya que el agua estaba caliente).


La natación fue mi mejor tramo del día, ya que tuve muy buenas sensaciones durante toda la prueba, saliendo del agua dentro de los diez primeros tiempos del día, en 19:52. Lo único negativo es que me había quedado a unos 20 segundos de un grupeto de 5 triatletas que se había formado delante y estaba en tierra de nadie pedaleando absolutamente sin ver a nadie delante, ni nadie detrás.



Al poco tiempo de empezar a subir el primer gran desnivel del día me pasaba un triatleta hasta entonces desconocido para mi pero del que no me voy a olvidar, Manuel Lloret. Me ponía a su rueda y al poco tiempo pasábamos a Robert  Mayoral, que me había sacado 30 segundos en el agua y decidía subir el puerto su ritmo. El ritmo era muy bueno y cuando me quise dar cuenta estaba sufriendo bastante, pero ya teníamos el grupo donde iban los triatletas del 3o al 7o clasificado delante a menos de 20 segundos y decidí que me salía a cuenta intentar darlo todo para intentar enlazar. Cuando estábamos a 30 metros de ellos, el trazado se puso más caprichoso debido a un aumento de desnivel y exploté (literalmente), quedándome solo rodando durante varios kilómetros debajo de la lluvia que ya había empezado a caer.



Por detrás me cogía un grupo donde se encontraba Lluís Vila Aguilar y Robert Buday entre otros. Yo ya iba muy tocado, y a media subida del Sant Grau me volvía a quedar, haciendo gran parte del recorrido completamente en solitario, sin dejarme, pues sabía que había hecho hueco por detrás. Completé el tramo ciclista en 1:28:23, sufriendo mucho y sabiendo al empezar a correr que ya lo había dado todo, aún así conseguí arrastrarme para acabar en 13a posición final con un tiempo de 39:10 en la carrera.

En definitiva, un triatlón que intentaré hacer cada año para "testear" mi nivel de ciclismo, pues es un recorrido donde no te puedes esconder de ninguna de las maneras, y donde este año, debido a que tuve que buscar fuerzas de donde no las tenía, pasé muchos días sin apenas entrenar por lo cansado que me encontraba (por eso no me apeteció escribir esta entrada entonces), esperando al año que viene con muchas ganas (si me lo puedo montar bien para entrenar jeje).



miércoles, 14 de septiembre de 2011

XXVI Triatló de Catalunya

El pasado sábado 3 de setiembre tuvo lugar el XXVI Triatló de Catalunya, celebrado en la localidad de Banyoles, cápital de la comarca del Pla de l'Estany, en Girona. Este era un triatlón marcado con una cruz en mi calendario y para el cual llevaba toda la temporada preparándome, más cuando, después de la lesión en el pie durante mis vacaciones en octubre, envió al traste todo el inicio de la temporada (perdiéndome varios triatlones y arrastrándome en otros tantos).




El día no empezaba bien, ya que al tirarme al agua para el posterior bocinazo de salida, los triatletas situados a mis espaldas vieron la oportunidad de ganar posiciones y sin pensárselo dos veces me pasaron por encima. Después de árduos forcejeos consigo tomar aire y hacerme un sitio antes de empezar la prueba, pero más retrasado de lo normal, lo cual no es una excusa, sinó un fallo mío de no ser lo suficiente agresivo en este punto, cosa de la que tomo nota para la siguiente vez. No nadé especialmente cómodo, pero el tiempo comparado con el año pasado en el mismo recorrido fue lijeramente mejor, saliendo del agua en la posición 46 con un tiempo de 22:18.


En los primeros metros encima de la bicicleta soy alcanzado por Lucas Chirico y Sergio García de mi club y poco a poco vamos cazando a grupos que rodaban por delante nuestro, en general me sentí mejor que el año pasado, donde en las rampas iniciales lo pasé realmente mal. El punto de inflexión fue el pequeño puerto situado aproximadamente a 10km del fin del tramo ciclista, donde me había propuesto actuar si veía que el grupo se volvía conformista.  Había reservado bastantes fuerzas durante todo el transcurso de la prueba, y siendo el caso, ataqué (la cosa nunca vista en mi) para ver si el grupo se rompía y seguir siendo ambiciosos de cara a la carrera.

La jugada me salió bien en un primer instante, ya que a media subida me percaté que el grupo ya se había partido, con lo que me dejé cazar para colaborar con este grupo recién formado. En ese momento parecía que íbamos a llegar con ventaja respecto a nuestros perseguidores, pero finalmente fuimos absorbidos por un mega-grupo justo antes de la transición, con lo que todo el trabajo se fue al garete. En este tramo hice el parcial 51, y un tiempo de 1:07:02.

Durante los primeros pasos de la carrera empecé a sentirme mal del estómago, y poco a poco me fui desinflando como si de un globo se tratara hasta ponerme a caminar, fue bastante decepcionante, porque las últimas semanas había estado haciendo unos tiempos muy buenos (para mi) en los entrenamientos y estaba deseando la llegada del segmento a pie para disfrutarlo como nunca. El hecho es que cuando estaba por finalizar la primera vuelta (de las dos de las que constaba el recorrido) y viendo lo que me faltaba, se me pasaba por la cabeza abandonar, pero dado el esfuerzo realizado durante todo el verano para llegar bien aquí, tenía seguro que si no iba a acabar, sería por causas mayores. Así que a medida que el dolor de barriga se me fue pasando empecé a correr consiguiendo finalizar la prueba en la posición 60 de la general, con un tiempo corriendo de 43:30, lo que fue el parcial 161 del día, que da fe de mis problemas.

Es la primera vez que me ocurre algo parecido corriendo y de lo que tomo nota, ya que pienso que podría ser causa un gel que me tomé al final del tramo ciclista (gel que había probado en entrenamientos sin problemas, pero aún nunca en competición), o el hecho de beber demasiada agua (el año pasado sufrí una pájara por deshidratación en este recorrido y creo que iba con ese miedo). En definitiva, un día malo que no me tiene que desanimar para disfrutar los últimos triatlones que quedan de la temporada.